Cuando una embarcación realiza su anclaje en las zonas costeras, aparentemente, no causaría ninguna alteración al ecosistema marino. Sin embargo, en las profundidades del agua ocasionan varios daños a la flora y fauna.

Fernando Ortiz, coordinador de Conservación Internacional en Galápagos, explica que: “en 50 años el fondo marino del Archipiélago se ha destruido en los sitios turísticos por eso tenemos la necesidad de solucionarlo”. Ante esta problemática, la organización inició un proyecto denominado ‘Cero Anclas’.

En 2007 desarrollaron una aplicación piloto en la isla Bartolomé, ya que establecieron que el cable convencional que conecta al ancla con el barco altera las profundidades.

“Las anclas pesan 450 libras y su cadena mide media pulgada de diámetro. Con el movimiento del viento y las olas, dicha cadena se convierte en una especie de limpiaparabrisas que es su accionar va depurando todo”, explica el experto.

Las anclas rompen los corales y rocas donde habitan otras especies, mientras que las cadenas remueven los fondos arenosos y alteran a los organismos.

La alternativa

Durante un año utilizaron en el sitio de prueba un anclaje fijo distinto al tradicional. “Tiene tres componentes que son el ancla incrustada en el fondo, una línea que conecta el anclaje y una boya”, menciona Ortiz.

La primera variación en el proyecto consiste en mantener permanentemente el anclaje en lugares determinados para que las embarcaciones solo se ‘estacionen’ ahí y no en distintos sitios. 

Otro aporte es el cambio en la cadena, ya que será reemplazada por un cable elástico que no toca el fondo marino. Además, la boya será de plástico y no de metal.

“Al no tocar el cable el fondo, el movimiento no destruye este hábitat, donde se alimentan, anidan y viven cientos de peces e invertebrados”, acota.

Los ecosistemas marinos se recuperan rápidamente, por eso al dejar de alterarla “se ha visto que su biomasa se reestablece” -según el coordinador de CI-, por lo que en Bartolomé los resultados han sido positivos en la aplicación del proyecto.

Aplicación 

Después de analizar los resultados favorables del proyecto piloto en la isla Bartolomé, el Instituto Oceanográfico de la Armada (Inocar) adoptó la iniciativa ‘Cero Anclas’. Hasta mediados de este año tienen previsto colocar 70 anclajes fijos en los sitios de mayor visita turística de Galápagos que podrán ser usadas por 74 barcos autorizados con el peso apropiado a operar por la Dirección del Parque Nacional Galápagos. 

También, Fernando Ortiz, de CI, recalcó que se debe respetar el límite máximo de embarcaciones que pueden estar en un mismo sitio.

EL DATO

Los fondos arenosos en Galápagos son ricos en erizo verde, ‘dólar de Galápagos’, anguila de jardín y en tambulero.

De: http://www.lahora.com.ec/index.php/noticias/show/1101290956